En verano enseñamos nuestros pies casi a diario, por lo que deben estar perfectos. Ir al centro de estética a hacerte la pedicura es un lujo que, a veces, por falta de tiempo o presupuesto no te puedes permitir. En sólo 15 minutos y siguiendo estos consejillos podrás tener unos pies bonitos y cuidados:
- Si llevabas las uñas pintadas primero retira el esmalte y sumerge durante 10 minutos los pies en agua tibia con un poquito de jabón. Con esto conseguirás que la piel se reblandezca y te será más fácil eliminar imperfecciones.
- Pasado este tiempo saca tus pies del agua y sécalos bien. Después, comienza a eliminar las asperezas con ayuda de la piedra pómez (ten cuidado de no pasarte, si eliminas demasiada piel puede molestarte después).
- Aplícate un peeling para que tu piel quede más suave y libre de células muertas (puedes fabricar uno casero añadiendo a tu crema hidratante una cucharadita de azúcar).
- Es la hora de las uñas; retirar las cutículas con la ayuda de un palito de naranjo y empújalas suavemente hacia atrás, a continuación retiralas con el alicate cortacutículas.
- Corta tus uñas y límalas de forma recta.
- Por fin llega la hora de aplicar tu esmalte favorito (ya sabes este verano los colores ácidos son los reyes). Puedes utilizar unas almohadillas separadedos o algodoncillos para que te sea más sencillo y rápido.
¡¡Ya estás lista para lucir pies!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario