El principio para mantener la línea es sencillo y claro: Comer lo mismo que quemas.
Sin embargo, para conseguir esto no tienes que obsesionarte contando cada caloría que consumes, martirizarte por haberte comido un trozo de chocolate a escondidas o correr una maratón en la cinta de correr cada vez que te pasas de la raya!
La clave es COMPENSAR, no tiene más misterio, sólo requiere un poco de fuerza de voluntad y algo de conocimiento.
Para poder hacerlo aquí van unos tips de gran ayuda:
- ¡¡No picar entre horas!! Si te aburres en casa...sal a darte un paseo, lee tu novela favorita o ponte un capítulo de la última serie, pero no vayas a husmear a la nevera. Porque cuando picas es como cuando abres unas Pringles, cuando haces pop ya no hay stop!
- ¡Desayuna! Hay mucha gente que se salta el desayuno porque prefiere dormir media hora más, pero puedes desayunar un sándwich o prepárate un desayuno para llevar en el metro o el bus. Simplemente con llevarte una barrita de muesli o una pieza de fruta para tomar antes de empezar el trabajo. Esto te da energía para comenzar el día y además no llegas a la hora de la comida con un hambre feroz.
- ¡Se activ@! No tienes que estar todo el día corriendo de arriba abajo, pero intenta ir andando a sitios a los que puedas llegar en 10 o 15 min caminando, si vives en un piso bajo...no cojas el ascensor...No tienes que machacarte, pero con llevar una vida cotidiana activa, te puedes mantener. Si haces ejercicio mejor.
- No comer hidratos de carbono por la noche. Intenta evitar el pan, la pasta, el arroz por la noche. Intenta comer verdura y proteina. La fruta tiene un gran contenido en azúcar así que si puedes dejarla para la mañana y el medio día mejor.
Estos tips no son nada del otro mundo y no condicionarán tu vida diaria, pero seguro que consigues resultados!
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